Felicidades mis andaluces!!!!

Andalucía solo hay una...!!!!

                                                                   

Jugando con las emociones.... La costura y la vida

Valiente somos las personas que cuando cosemos y observamos que una de las puntadas va a deslucir nuestra labor admitimos el error, damos marcha atrás, descosemos, acariciamos el trozo de tela descosido, lo mimamos para que no se note ninguna señal y volvemos a hacer perfectas puntadas sobre ella y reconocemos que ha sido un mal punto. Luego visitamos el sitio adecuado donde nos dejamos aconsejar y guiar para que nuestras manos aprendan o sean capaces de coser con hilos estropeados, con hilos viejos, con hilos de mala calidad sobre telas quizás pasadas por el tiempo, sobre telas finas o gruesas y también donde aprendamos a coger con nuestros dedos hasta la más cansada de las agujas que pueda existir, para que  esa pieza de labor que nos va a acompañar en nuestras vidas luzcan esplendorosa y lozana a nuestro lado, pero para ello necesitamos una gran dosis de amor y sobre todo... de "Valentía"

                                                                             

Para mi habitación de costura

Hace unos meses hice unas cortinas para mi habitación de costura. Aquél entonces fui a mirar telas de cortinas y no vi ninguna que me diera rollo por lo que terminé comprando una de rallitas blancas y lilas de la gama de las de Vichy de cuadritos de toda la vida. Me quedé flipá al ver la cantidad de colores nuevos que hay hoy en día, siempre la había visto de cuadritos rojos o azules, y me hizo gracia que también las hubiera de rallitas. Como me sobró tela y mi silla no pegaba mucho con la decoración de la habitación, se me ocurrió hacerle unas fundas al asiento y al respaldo y aquí os quiero muestro como me ha quedado.

Después de mirar telas de cortinas, terminé comprando esta de la gama de Vichy de toda la vida

Esta es mi silla, muy cómoda pero el color no pegaba con la decoración de la habitación 

¿A que parece que la hubiese tapizado?. Pues le he hecho una funda para el asiento y otra para el respaldo y le he metido una goma elástica para que se acople. Así podré desenfundarla y lavarla cada vez que le haga falta 

Así ha quedado el conjunto de cortina y silla. Es un sitio donde paso muchas horas y es muy importante estar cómoda y a gusto en el sitio

                                                                       

Como tener un ropero inteligente

Ya sé que es muy difícil no caer en la tentación de darse una vueltecita por las tiendas y no picar algo, pero os tengo que decir que se puede ir guap@ y a gusto sin caer en la locura consumista. Quien se deja un dineral en ropa es porque quiere, ya que hay muchos trucos para renovar nuestro estilo y nuestro ropero con la ropa que ya tenemos y gastándonos muy poco dinero.
aquí va alguno de ellos.
- Hacer limpieza radical:
Lo primero que tenéis que hacer es deshaceros de la ropa que sabéis que no os vais a volver a poner, así podéis tener más claro lo que sí os ponéis. Por lo que tu ropero deja de ser algo lleno de ropa que no os ponéis por cualquier escusa.
- Seleccionar la ropa que no os ponéis:
De la ropa que, en teoría, vais a deshaceros, mirar una a una y échale imaginación para ver qué segunda oportunidad le podéis dar. Nos deshacemos de mucha ropa que con un simple retoque la podemos seguir usando, como por ejemplo: un pantalón de campana o de pernera ancha se puede hacer pitillo o recto, una camisa ancha se puede estrechar, un abrigo largo hacerlo corto... Así mil opciones e ideas.
Y si no tenéis imaginación no dudéis en confiar en las personas que como yo nos dedicamos a ello, que estaremos encantadas de ayudaros.
-No tires nada a la basura:
De la ropa que ya es seguro que no os vais a volver a poner y que no se le puede sacar más partido, hay sitios de ropa de segunda mano o vintage que os la recogen, os la compran o intercambian por otra.
Yo personalmente, siempre busco a alguien de mi entorno que sé que la puede seguir usando o la llevo a instituciones para gente sin recurso.
-Conoce tu cuerpo:
Mucha de la ropa que nos compramos se queda muerta de risa en el ropero por el simple hecho de que "no me acaba de quedar bien, pero Jobar! antes me gustaba". Esto es malgastar el dinero. Tenéis que conocer vuestras medidas, no os equivocaréis de talla. Ya sabéis que esta ropa que no acaba de quedaros bien, con un pequeño retoque la podéis poner otra vez al uso.
-Haz una lista de lo que realmente necesitas:
Una vez terminada la limpieza del ropero, pararos a pensar cuales son esas prendas básicas y todoterreno que de verdad necesitáis. Esto os ayudará a tener vuestros objetivos más claros, a definir vuestro estilo y a evitar desperdiciar el dinero.
-Inspírate:
Mi principal fuente de inspiración es la calle, voy siempre mirando como va vestida la gente, además hay blogs y webs de moda gratuitos llenos de ideas sobre como combinar y dónde encontrar cualquier prenda o complemento.
Como podéis ver, practicando estos pequeños trucos tendréis una cartera sana y un ropero inteligente a la moda. La diferencia está en las pequeñas cosas!!!
Espero serviros de ayuda. Besazos!!!
                 

                                                                   

El abrigo tiene que quedar impecable

Muchas veces nos dejamos de poner una prenda por un simple detalle que ahora no nos gusta y pensamos "jobar! antes me gustaba y me lo ponía". Esto es lo que le ha pasado a esta chica que me viene con este abrigo y su pregunta es: Quiero quitarle el cuello, ¿eso se puede hacer?. Así me gusta, con las ideas claras, por supuesto que se puede hacer!. Y ahora lo vais a ver 

La verdad es que tiene un cuello bien considerable. Se puede abotonar y cerrar y así no se necesita bufanda porque te cubre todo el cuello

Por detrás se ve bien la proporción del cuello

Mira que bien!. Ha quedado de cuello de tirilla

Lo único que he hecho es quitarle la solapa y volverlo a coser. Que cambio eh!!

Nociones de costura para primeros auxilios: coser un roto o un descosido

Imaginaos un día que os queréis poner una prenda y tiene un roto o una costura desgarrada, ¿no es preferible poderlo coser en ese mismo momento en vez de quedaros con el disgusto de no poder ponérsela?.
Pues os digo como lo podéis coser vosotros mismos.
Tenéis que enhebrar el hilo en la aguja y hacerle un nudo para que no se suelte.
Giráis la prenda del revés y tiráis suavemente de la costura para localizar el agujero.
Metéis la aguja a través de la costura del tejido hasta el otro lado de la costura y de nuevo la vuelta. Tiráis del hilo a través creando una puntada corriente. Continuáis dando puntadas a lo largo de la longitud del desgarro. Ya en este punto volvéis a meter la aguja en un lado de la costura y que salga por el otro lado. Luego tiráis del hilo sobre la parte superior para repetir la puntada, que entra por el mismo lado que antes. Continuáis a lo largo de la rotura. Esto asegura las puntadas de la costura e impide el deshilachado.
Cuando hayáis terminado hacéis unas pequeñas puntadas en el mismo lugar y cortáis el hilo lo más cerca posible de la tela y asunto terminado. Que bien saber hacer esto eh!!!

                                                                       

Un poco de historia

La costura a mano es un arte de más de 20.000 años de historia. Las primeras agujas de coser fueron hechas de huesos o cuernos de bestias y los primeros hilos con tendones de animales, siendo sus primeras manifestaciones como el Homo hábilis. Después se hacían de madera, roca o hueso y, más tarde, de hierro o de metal. Se cree que los chinos fueron los primeros en utilizar agujas de acero, y que los árabes se encargaron de llevarla a Europa.
Ya en 1730 había importantes fabricantes en Alemania y en Inglaterra durante el reinado de Isabel I. en esos tiempos la aguja de metal se hacía sin ojo, a modo de ganchillo para atar el hilo. Sin embargo puede citarse la existencia de "agujas con ojo" en tiempos de Jesucristo: "Es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja, que para un rico entrar en el reino de los cielos"; aunque para este tiempo no fueran hechas aún de madera o de hueso.
Para datar a la aguja de metal de un ojo como las de hueso fueron necesarios una serie de desarrollos posteriores. Concretamente, el ojo de la aguja es un invento que data de 1825, las primeras agujas de metal con ojo salieron al mercado en 1826, pero no fue hasta 1885 cuando la maquinaria fue arreglada para estampar bien el ojo en la aguja como la que tenemos hoy en día.

Los neandeltales se cubrían con pieles y ya utilizaban utensilios de piedra, por lo que ya aquí utilizaban la aguja de piedra para perforar las pieles

La preparación de las ropas con pieles para cubrirse era una de las cuestiones de mayor importancia para ellos

       

La invención de la aguja de piedra o hueso con ojo fue una gran invención para confeccionar y atar las pieles ya que se requería un utensilio que las perforase

Las agujas de madera llegaron después